La artritis psoriásica puede presentarse a través de diversos síntomas, siendo muy variable entre personas que la padecen.
Los signos clínicos tempranos incluyen inflamación, dolor e hinchazón de las articulaciones. Estos síntomas pueden aparecer de forma lenta y progresiva y muchas veces podrían ignorarse o confundirse con un golpe, solo que evolucionan progresivamente.
Uno de los signos característicos es el “dedo salchicha” o inflamación/hinchazón del dedo (ya sea de manos o pies), su nombre clínico es dactilitis, y se caracteriza por la inflamación de la articulación e incluso del tendón o ligamentos vecinos. Esta hinchazón del dedo o dactilitis puede ser aguda (inflamación dolorosa) o crónica (inflamación con menos dolor).
Otros síntomas incluyen rigidez y dolor en las articulaciones que mejora con el movimiento, o sensación de cansancio.
Además es muy común una manifestación llamada “entesitis”. Se manifiesta con la inflamación de la zona de inserción entre los tendones, ligamentos y músculo con el hueso, es decir, la entesis. En la artitis psoriásica puede encontrarse una entesitis en el talón de Aquiles, planta del pie y zona sacra.
Otro de los signos de los pacientes con artritis psoriásica es la afectación de la piel (brote de psoriasis). Las manchas de color rosáceo suelen llamar la atención y llevarnos al dermatólogo, que indicará si es psoriasis y si debes además de tratar tu piel, acudir al reumatólogo. Pueden aparecer síntomas también en las uñas, que presentarán pequeñas manchas o signos de debilidad.